¿Sabías que por más molesta e incómoda que pueda llegar a ser, la tos es de suma importancia para nuestro cuerpo? Toser es un mecanismo de defensa que tiene nuestro organismo para mantenerlo libre de agentes externos que pueden dañarlo, como ciertas sustancias nocivas, partículas extrañas y microorganismos infecciosos.
¿Qué ocurre en tu cuerpo cuando toses?
La tos comienza por la estimulación inflamatoria y/o irritante, mecánica, química o térmica de los receptores de la tos, que provoca una inspiración profunda de aire, la cual genera el volumen necesario para una tos efectiva. Después se juntan las cuerdas vocales y se cierra, la glotis.
Enseguida, se contraen los músculos respiratorios, aumentando la presión dentro del tórax y de las vías respiratorias. Finalmente, se relajan las cuerdas vocales y se abre la glotis, el aire sale disparado casi a la velocidad del sonido provocando ese ruido característico de la tos.
El aire espirado al toser, ayuda a expulsar el moco (flemas) y cualquier partícula extraña para mantener las vías respiratorias y los pulmones limpios, para que puedan desarrollar sus funciones adecuadamente.
Causas de la tos
Aunque la tos puede ser un acto voluntario, nuestro cuerpo generalmente la lleva a cabo como un reflejo involuntario para defenderse de distintos agresores:
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- Resfriado común / Gripe.
- Cualquier elemento irritante (gases, humo de cigarrillo, vapores irritantes, partículas de polvo, entre otros).
- Contaminación ambiental.
- Cambios de temperatura.
- Aire acondicionado.
- Tabaquismo.
- Enfermedades respiratorias (asma, bronquitis, rinitis o sinusitis, laringitis, faringitis, entre otras).
La tos es una respuesta de defensa que ayuda a tu cuerpo a detectar que algo anda mal y a protegerlo. Ante cualquier sospecha de enfermedad, consulta a tu médico.
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